sábado, 18 de abril de 2015

No Quiero que me Olvides (Kyumin) - 35

Capítulo 35







- Bebé… aquí viene el avioncito…
- Appa, no soy un bebé
Rió Sunny, sentada en mis piernas.
- No pude hacer esto nunca, déjame hacerlo ahora
Le pedí, haciendo un puchero.
- De acuerdo
Sunny abrió la boca y yo introduje la cuchara, luego limpié la boca de mi hija con el babero de Jessica.
- Que buen padre…
Dijo Minnie, sonriente, amamantando a Jessica.
- No me considero el mejor, a penas voy un año en el negocio, pero lo intento
- Para mí si eres un buen appa
Intervino Sunny, tomando su cuchara y comiendo ella sola.
- Gracias…


***
- Minnie…
Ella me miró, sentada en el piano del salón de música, con la boca entreabierta y las mejillas sonrojadas. Había estado tocando una canción, una de mis canciones, aquella que hablaba sobre ella, aunque todas mis canciones hablaban sobre ella. Minnie tomó sus partituras y se levantó, acomodando con nerviosismo los instrumentos que nos rodeaban.
- ¿Qué quieres?
Habló al fin, sin mirarme, tomando un trapo y limpiando los instrumentos de metal.
- Venía a verte…



Ella dejó de limpiar y me miró, luego bajó la mirada y siguió su labor.
- Ya te puedes ir, ya me viste…
- Minnie…
- Por favor, Kyuhyun… - volteó a verme - ¿Qué es lo que quieres? – preguntó, guardando el trapo - ¿Ver a Sunny? De acuerdo, te dejaré verla
- No es lo único que quiero…
Minnie me miró y negó con la cabeza.
- No sé cuál es tu juego, pero desde ya te digo que lo dejes, no me gusta
- Minnie… - me acerqué a ella – Yo aún…
- Han pasado tres años, Kyuhyun, es mucho tiempo, en los que no diste señales de vida – empezó a decir, sentándose en la banca del piano – No puedes esperar que las cosas sigan iguales, porque no lo son, ya no, ya no soy la misma que te hubiera esperado eternamente
- Minnie… yo… - la miré fijamente – Aún te amo
- Tres años Kyuhyun… - volvió a decir – Si fuera cierto, hubieras vuelto antes
- Pero…
- Mira… - Sungmin se me acercó, sonriendo, pero no eran las típicas sonrisas que ella me daba – Yo continué con mi vida, a pesar de todo, tú has lo mismo
- No quiero…
- Creo que estás confundido – la miré sin entender – Has visto a Sunny y algo en ti despertó, es normal, enterarte así de que tienes una hija… - miré el suelo, sintiéndome mal – Pero eso no significa que aún me ames
- Sí te amo
- Si lo hubieras hecho no te hubieras ido – Minnie me miró fijamente, con tristeza – Siempre me decías que la fama no nos separaría, que no lo permitirías, pero lo hiciste
- Yo lo siento… en verdad no quería
- Pero lo hiciste – asentí – El que hayas o no tenido la intención, queda irrelevante, porque lo hiciste
- Pero tú te fuiste primero
Le recordé y ella chasqueó la lengua.
- ¿Lo olvidaste? – me preguntó, negando con la cabeza y riendo – Me terminaste justo cuando te ibas de gira ¿Yo me fui? Sí… después de que me dejaste para ir a tu gira como el famosísimo “Cho Kyuhyun” que ahora estaba soltero
- Sungmin…
- Solo vete ¿Quieres? – me pidió – Por favor, y no vuelvas a insistir. Lo único que nos une es Sunny, fuera de eso no eres nada mío
- Sungmin…
- Deja de repetir mi nombre, por favor – sentí que el corazón se me detenía y volvía a latir, pero era doloroso – Y deja de venir a verme, no quiero volver a pasar por lo mismo
- De acuerdo… - me escuché a mí mismo hablar – Supongo que me iré…



- ¡Espera! – me giré a verla, esperanzado – Tú quieres estar cerca de Sunny – asentí - ¿Cómo lo vas a lograr si eres un ídolo famoso?
- Yo…
- Fue mi decisión tener a Sunny y no decirte nada – confesó – No quiero a mi hija como foco de los medios – me miró fijamente – Y tampoco quiero que tu carrera se vea afectada por mi culpa…
La miré sorprendido ¿Ella se preocupaba por mí? ¿Lo estaba haciendo? ¿Esto significaba algo? Detrás de esa pared que había construido entre nosotros dos, tal vez, quizá, ahí aún estaba mi Conejo.
- Descuida, yo me las arreglaré – ella asintió – Por ahora lo único que quiero es conocerla y… hacerme responsable
- Bueno… ya no tendré tantos problemas con el dinero entonces
Minnie rió y yo no pude evitar hacer lo mismo.
- Sungmin… - una maestra entró por la puerta – Sunny está con fiebre
- ¿Otra vez? – preguntó Minnie, mirando su reloj – Tengo clases en cinco minutos – la campana sonó - ¿Dónde está?
- En la enfermería, se puso pálida y su profesora pensó que sería lo mejor
- Yo la puedo llevar – me ofrecí - ¿La llevo al hospital?
- No – contestó Minnie – Es solo fiebre, no amerita que se vaya al hospital, solo llévala a mi casa – me entregó la llaves – Ahí hay medicinas y… Kyuhyun… ¿Podrías quedarte con ella hasta que vuelva?
- ¿Yo?
Pregunté sorprendido y de cierta forma, asustado.
- Sí, quiero que lo hagas
Sus palabras me sorprendieron aún más.
- De acuerdo…
- Bien… ve, ya sabes dónde está la enfermería
- Sí…
- Kyuhyun… - la miré – Cuídala
- Como si fuera mía
Contesté, sonriendo, ella hizo lo mismo, y entonces salí del salón de música, escuchando que la otra maestra le preguntaba:
- ¿Siguen juntos?
- No… él es solo un amigo
Caminé hacia la enfermería, sintiéndome extrañamente optimista. Tal vez ella había dicho que solo éramos amigos, tal vez la palabra “Amigo” me dolía como si fuera una bala al pecho, pero al menos demostraba que no había odio, que tal vez el enojo que sentía hacia mí estaba menguando. Entré en la enfermería y vi a la pequeña niña en una camilla con un pañuelo blanco en la frente.
- Sunny…
- ¡Eres tú!
Gritó, mirándome con ojos vidriosos y una gran sonrisa en los labios.
- ¿Kyuhyun?
Me giré, era Hyoyeon, una de las viejas amigas de Seohyun.
- Hyo… ¿Eres la nueva enfermera?
- Sí…
- Yo… vengo por Sunny
- ¡Oh! – miró a la niña y luego a mí - ¿Los rumores eran ciertos?
- Hyo…
- Cuando Seo se entere de esto… pegará el grito en el cielo, ella sigue obsesionada contigo y con hacerle la vida imposible a Sungmin
- Hyoyeon… no le puedes decir nada a nadie, en especial a Seohyun
- De mi boca no saldrá nada – dijo – Pero ella lo averiguará, después de todo, Soon Kyu es la hija ilegítima de “Cho Kyuhyun”, y tu vida es un libro abierto
- Hyo…
- Puedes llevártela, pero debiste de evitar venir, no es sensato, les darás algo de qué sospechar a la prensa que te persigue
- Hyo… gracias…
- Solo lo hago porque Seohyun es una perra y Sungmin una chica muy agradable, pero tú sigues siendo un imbécil
- Lo sé – no pude evitar reír – Igual… gracias
- Appa… - Sunny me jaló de la manga - ¿Quién es Seohyun?
- Nadie importante – contesté, cargándola en brazos – Ahora señorita, vamos a casa para que te tomes las medicinas, descanses y comas muchos dulces
- ¿Y mi omma?
- Está ocupada – contesté, saliendo de la enfermería – Así que pasarás tu primer día con appa
- ¿Mi primer día con mi appa? – preguntó sonriente, abrazándose a mí - ¡Sí! ¡Tendré todo un día con appa!


***
- Eso demuestra que sí eres un buen appa
Dijo Sungmin, dándome un beso. Empecé a corresponderle, dejando la comida de Sunny de lado y abrazando a mi novia. Esperé tanto para que me dijera eso, ahora todo podía ser perfecto, juntos, como debió ser… el timbre sonó.
- Yo abro, debe de ser Henry
Me separé de mi novia y salí de la casa. A veces pensaba que darle una llave de casa a Henry sería buena idea, él se quedaba de viernes a domingo en casa, debía de darle una llave y dejar que me demuestre lo responsable que es con la casa de su hyung. Caminé por el sendero adoquinado y abrí la puerta…
- ¡Kyuhyun!
- ¡¿Omma Onew?!



Pregunté, casi cayéndome al ver a la omma de mi appa.
- ¡Estás enorme!
Mi abuela entró en la casa y detrás de él mi abuelo con dos maletas.
- Appa Joon – saludé a mi abuelo, appa de mi appa – Déjeme ayudarlo con eso
- ¡Mejor ayúdame a mí!
Gritó una voz, era mi abuelo Jonghyun



cargando todas las maletas de la abuela Key.
  - ¡Ay, no te quejes, apenas son diez maletas!
Exclamó la abuela Key.



- Hola omma Key
Sorprendido al ver a mis cuatro abuelos reunidos en mi casa.
- Yo te ayudo, Jong
Se ofreció appa Joon, tomando unas cuantas maletas. Entre todos logramos meter las maletas de omma Key. Yo aún no entendía qué hacían todos mis abuelos ahí, pero suponía que mi omma tenía algo que ver en ello.
- ¡Minnie, mis abuelos han venido!
Anuncié, entrando a la mansión con las maletas.
- ¡Ya sabía, por eso hice mucho pollo frito!
- ¿Alguien dijo pollo frito?
Preguntó omma Onew, sonriendo ampliamente.
- Espero que Sungmin-shi haya hecho mucho
Susurró appa Joon.
- ¿Qué hacen todos aquí?
Preguntó Henry, entrando en la casa.
- Mi hija me dijo que nos quedaríamos en la casa de Kyuhyun hasta la boda de Siwon
Contestó appa Jong.
- Hablando de hijos… quiero ver a los míos
Se quejó omma Onew.
- Minho debe de estar en su casa, Yunho debe de estar en el trabajo
Dijo appa Joon, mirando su reloj.
- ¡Abuelos!
Gritó Sunny, corriendo hacia ellos.
- ¡Soon Kyu! – gritó omma Key - ¡¿Que demonios llevas puesto?!
- Aquí vamos de nuevo…
Susurró Henry; iban a ser unos largos días hasta la boda de Siwon, sobre todo si mis cuatro abuelos se quedaban en mi casa…
000000000000000000

ESPERO QUE LES HAYA GUSTA. ESTE FINAL ME DIVIRTIÓ MUCHO, MIENTRAS LO ESCRIBÍA ME IBA IMAGINANDO CÓMO SERÍA TENER CUATRO ABUELOS LOCOS ^^ HAHAHAHA. BUENOS CHINGUS!!! ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO, COMENTEN!!! SIEMPRE ES BUENO SABER SI LES ESTÁ GUSTANDO HASTA AHORA LA HISTORIA, A PESAR DE QUE NO SEA UN YAOI. LES PROMETO QUE MI SEXTA NOVELA SERÁ UN YAOI, CUANDO TERMINÉ DE ESCRIBIR LA QUINTA NOVELA QUE ESTOY ESCRIBIENDO LO HARÉ ¡LO JURO!!!! BESOS A TODOS!!!


domingo, 12 de abril de 2015

No Quiero que me Olvides (Kyumin) - 34

¡HOLA LECTORES! AQUÍ LES DEJO UN NUEVO CAPÍTULO DE ESTE FIC, ESPERO QUE LES GUSTE, NO SE OLVIDEN DE PASAR POR MI NUEVA NOVELAS "ÁRBOL DE LA VIDA (EXO)"
ANNYEONG!!!!!
0000000000000000000000

Capítulo 34






- ¿En serio?
Pregunté a Minnie.
- Sí… para mi omma y appa fue un gran impacto que su hija pequeña estuviera embarazada – siguió contándome Minnie – Fue difícil, estaba sola y mis padres me estaban dando el sermón de la vida – bajé la mirada – Y luego les dije que tú no te harías responsable, que habías terminado conmigo
- Lo siento…
Miré mis manos, sintiéndome enojado conmigo mismo. Habían pasado unos días, Minnie había logrado recordar algunas cosas, todas de la época en que estuvo embarazada, lo sola que se sentía y lo mucho que me extrañaba. Ella me lo comentaba, porque me gustaba saber acerca del progreso de sus memorias, pero me entristecía saber lo idiota que era y cómo no estuve para ella en esos momentos. Cuando la escuchaba, la idea de tener una máquina del tiempo se hacía más grande, pero sabía que eso era imposible, jamás iba a poder cambiar lo que hice, solo podía intentar compensarla, pero ni toda mi fortuna me alcanzaría para lograrlo.
- Deberías de sentirlo mucho – Minnie se recostó en mí – Appa quería matarte, omma lo convenció de que no lo haga – rió, yo sin embargo no pude hacerlo – Y luego tú te fuiste
- Y tú te fuiste también – le recordé y ella me miró con confusión - ¿Recuerdas a dónde?
- No – contestó – Pero supongo que debió haber sido en América, como se supone que debió haber sido hace mucho
- Conejo… - la miré, acercando mi rostro al suyo – Sé que no puedo retroceder en el tiempo y quitar todo lo malo que he hecho, pero prometo darte el mejor futuro de todos en compensación, porque te amo, porque lo mereces, porque eres el amor de mi vida…


***



¿Minnie con Zhou Mi? Mi… hija… le había dicho “Oppa” y al parecer se llevaban muy bien ¿Qué podía hacer yo? Sin darme cuenta, estaba buscando información de Minnie en internet, no había nada más allá de las viejas noticias sobre viejos rumores y el escándalo que hubo entre nosotros, al parecer la prensa había perdido el interés en ella. Busqué a Zhou Mi, obtuve el mismo resultado, al parecer sus días de fama acabaron con el segundo lugar en “Inmortal Song”
No había nada que me vinculara a la niña que Minnie llevaba de la mano esta tarde, nada. Sunny era una extraña para el mundo y para mí, pero era mi hija ¿Cómo puedes no saber que tienes una hija? ¿Cómo puedes verla y ya sentir algo de afecto? ¿La quería? No lo sabía, pero sentía algo, pues era mía. Y Minnie… mi corazón había vuelto a latir tan pronto como la vi; antes pensaba que si la viera, sentiría culpa, pero ahora… la vi y ahora no la puedo sacar de mi mente. Pero estaba enojado, pues me había ocultado a Sunny; y estaba aún más enojado conmigo, por haberlas perdido.
Tomé mis cosas y con decisión, me subí al auto. Aparque en mi casa, esa en la que había vivido hace mucho. Caminé a la puerta y toqué el timbre. De nuevo mi abuelo me abrió y me hizo pasar, yo saludé con una venia.
- Kyuhyun… - mi mamá me miró - ¿Cómo has estado?
Preguntó con clara preocupación, era de esperarse, pues estuve una semana encerrado en mi casa, con miedo, con amargura, con pena ¿Por qué pasaba esto? Llegué, vi la realidad, me golpeó, y como una gallina cobarde, me fui ¡No tenía agallas! Jamás las tuve, si las tuviera me hubiera enfrentado a todo con tal de conservar a Minnie a mi lado, pero no lo hice. Soy una mala persona, y lo sé porque he dejado a una niña sin un padre, lo sé porque le rompí el corazón a una persona a la que dije amar de forma incondicional ¿Qué clase de persona soy? Pues soy peor que un adefesio.
- Omma… - respiré hondo, necesitaba calmar mis emociones – Quiero saber donde viven los Kim
- Kyu…
- Sé que nadie de esa familia me quiere cerca ¡Pero yo quiero hacerme responsable! ¡Quiero lo que perdí! ¡Quiero ser valiente por una vez en mi vida! Así que por favor… compréndeme, es lo único que pido, una dirección, por el bien de mi cordura…
- Viven en Gangman, en el departamento que era de Siwon y Heechul, ellos ahora viven en uno más grande, cerca de la empresa de tu padre
- Gracias – me acerqué a mi omma y la abracé fuertemente, recargando la cabeza sobre su hombro – Prometo ser un mejor hijo y un mejor hombre
- Ya lo eres Kyuhyun… cometer errores es normal, y es valiente el reconocerlos
- Omma…
Mis ojos se aguaron y entonces volví a abrazarla.
- Taemin ¿Dónde dejaste mi nuevo “Oscar de la Renta”?
- En tu habitación omma – contestó mi omma y la abuela Key asintió, desapareciendo por el pasillo – La próxima vez que vengan tus abuelos, los mandaré a tu casa
Reí, me despedí del abuelo Jonghyun y salí de mi vieja casa. Tomé un taxi hasta el viejo departamento de Siwon y Heechul. Caminé hacia el intercomunicador y ahí me quedé ¿Qué debía de hacer? Era sábado así que todos debían de estar en casa ¿Me recibirían bien? Leeteuk tal vez, pero tal vez no ¿Kangin? Él de seguro me echaría de su casa ¿Y Minnie? ¿Estaría molesta conmigo? Eso era más que obvio, lo había demostrado muy bien cuando nos vimos ¿Y Sunny? ¿Ella me querría? ¿Me odiaba por no haber estado con ella? ¿Qué le parecería saber que soy su padre? Había muchas incógnitas que no podía responder. Respiré hondo y toqué el timbre.
- ¿Sí?
Preguntó una voz, era Leeteuk.
- Ho… hola
Saludé con nerviosismo.
- ¿Kyuhyun?
Preguntó en un susurro.
- Ahjumma… por favor
- Pasa
Me dijo y se escuchó el sonido del teléfono colgándose. Caminé hacia el ascensor y me subí, respirando hondo ¿Estarían todos ahí? ¿Estaría Minnie ahí? Las puertas se abrieron y caminé hacia el departamento. Mi corazón latía con mucha fuerza ¿Estaba preparado para esto? Es decir… hasta hace una semana yo solo era “Cho Kyuhyun” un ídolo musical, ganador de muchos premios y con fama internacional; pero también era la persona que decía haber dejado de amar a Minnie cuando claramente no era así ¿Estaba preparado para esto? Mi corazón había vuelto a latir por ella tan pronto como la vi ¿Cómo pude haber creído que la había dejado de amar? ¡Eso era imposible! Se lo dije una vez y lo rectifico, pues era verdad: Minnie era, y será siempre, mi corazón. Toqué la puerta…
- Kyuhyun…
Leeteuk me abrió la puerta y me dejé el paso libre.
- ¿Quién es omma Teukie? – preguntó una vocecita - ¿Omma volvió?

Entonces, vestida con un vestido rosa, apareció Sunny, con un Conejo de peluche.



- Hola…
Le saludé, ella solo me miraba sorprendida.
- ¡Viniste! – ella corrió hacia mí y me abrazó las piernas – Demoraste mucho en venir, omma siempre me decía que vendrías tarde o temprano – Sunny me sonreía, la misma sonrisa de Minnie - ¿Aún amas a mi omma?
- Los dejaré solos
Habló Leeteuk, con lágrimas en los ojos, yéndose a la cocina.
- ¿Aún amas a mi omma? – volvió a preguntar Sunny - ¿Vendrás a vivir con nosotras?
- Sunny…
- Appa…
Miré a Sunny con los ojos bien abiertos. Sentí una presión en el pecho y unas ganas irrefrenables de echarme a llorar. Me coloqué a su altura y la abracé, derramando las lágrimas, sin poder contenerme, pues esto era real, y la realidad dolía más que cualquier otra cosa.
- ¿Qué haces aquí?
Preguntó una voz y yo me separé de Sunny.
- Yo…
- No te quiero ver en mi casa
Soltó, mirándome con severidad, con enojo, con odio.
- Minnie…

- ¿Omma, por qué quieres que appa se vaya?
Preguntó Sunny, viendo a Minnie.
- Minnie… por favor… yo
- No me importa lo que tengas que decirme – Minnie tomó la mano de Sunny y la alejó de mí – Quiero que te largues y sigas con tu vida ¡Lejos de aquí!
- Omma…
- ¡No lo voy a hacer! – Minnie me miró con aún más enojo - ¡No te voy a dejar!
- ¡Ya lo hiciste!
- ¡Y fue un error! – grité – Minnie… no sabes lo arrepentido que estuve cuando lo hice
- ¿Y de qué sirve que me lo digas ahora? – me miró con una ceja alzada, caminando lejos con Sunny – Han pasado tres años Kyuhyun ¡Tres años! ¡¿Y vienes ahora a decirme eso?!
- Minnie… por favor, tienes que escucharme
- No lo voy a hacer – entramos en una habitación con una gran cama, la cual ocupaba casi todo el espacio de la habitación, y muchos juguetes en un rincón – Quiero que te vayas y te alejes, no quiero verte
- ¡No me voy a alejar! – grité, tomándola de los hombros - ¡No quiero volver a irme! ¡No quiero volver a dejarlas!
- Ya lo hiciste… - volvió a decir ella – En tres años no diste señal alguna de querer volver a verme, me eliminaste de tu vida ¡Nos! Eliminaste de tu vida – señaló a Sunny y después a ella - ¿Crees que eso se me va a olvidar con unas simples palabras? ¿De qué me sirve que me digas que te arrepentiste al instante de lo que dijiste? Ya es muy tarde…
- Minnie… no quiero alejarme de nuevo
- Pues lo harás – me dio un empujón y volvió a salir, siendo seguida por Sunny – Y te alejarás de mi hija
- ¡También es mi hija!
- ¡No, no lo es! – gritó Minnie, encarándome - ¡Jamás has estado con ella, en tres años no has estado para ella, eso te quita el derecho de ser nombrado padre!
- ¡No dejaré que hagas eso! – la miré fijamente, con enojo – Ella es mi hija, me quiero hacer responsable de ella, aún tengo tiempo para reparar mi falta…
- ¿Cómo lo harás? – preguntó, mirándome con una ceja alzada y los brazos cruzados - ¿Ah? Respóndeme ¿Cómo se verá que el gran ídolo de fama mundial “Cho Kyuhyun” uno de los solteros más codiciados de Asia, tenga una hija secreta? – la miré boquiabierto, no me había puesto a pensar en eso - ¿Lo aceptarán? Es eso lo que siempre te preocupó, esa siempre fue tu prioridad ¿Y si te vuelven a amenazar con quitarte tu contrato? ¿Aún así lo harías?
- Sí - contesté decidido – Sí lo haré
- Lo dudo – la miré sorprendido, su desconfianza en mí dolía más que cualquier otra cosa – No serías capaz de hacerlo
- Minnie…
- Ahora vete, tengo cosas que hacer, no todos podemos darnos el lujo de estar sin hacer nada por mucho tiempo, el tiempo libre es un lujo para mí en estos momentos
- Yo te puedo ayudar, tengo dinero
- No me importa, he sobrevivido tres años sola ¿Lo olvidas? – miré el suelo, yo jamás podría saber eso – Ahora vete
- Appa… - Sunny jaló de mi pierna – No quiero que te vayas
- Vendré mañana, lo prometo… - miré a Minnie - ¿Podré hacerlo?
- Me lo pensaré
- Minnie… ahora que la conozco, no puedo estar lejos de ella
- No quiero arriesgar a que le pase lo mismo que a mí
Fue lo único que dijo y yo asentí.
- Appa…
Los ojos de Minnie estaban llenos de lágrimas y su boca formaba un puchero de tristeza.
- Te prometo… - respiré hondo, no podía verla a los ojos – Sunny, te prometo que intentaré de todo con tal de verte
- Appa…
- Lo siento… - dije, separándome de ella – Me tengo que ir
- ¡Appa! – gritó Sunny, aferrándose a mi pierna - ¡No me dejes, appa!
- Sunny… - mis ojos comenzaron a derramar lágrimas – Por favor…
- Sunny, debe irse
Le dijo Minnie.
- ¡No! – Sunny aferró más mi pierna y Minnie tomó a la niña de la cintura - ¡Dijiste que él vendría y seríamos una familia! – miré a Minnie, ella solo lloraba - ¡Dijiste que aún lo amabas! ¡No me quites a mi appa!
- Sunny… por favor
- ¡No! – Minnie logró quitármela de encima - ¡Appa!
- Vete…
Me ordenó Minnie y yo abrí la puerta.
- ¡Appa! – gritó la voz de Sunny, amortiguada por la puerta - ¡Vuelve! ¡Appa!
- Lo siento…




***
- Mira el dibujo que hice en la escuela
Sunny sacó una hoja de papel de su mochila.



. Lo desenrollé y vi dos imágenes poco definidas. Éramos Sunny y yo, abrazados, con corazoncitos flotando a nuestro alrededor y muchas notas musicales. Había un gran mensaje en letras rojas que rezaban “Sunny y appa” Miré a mi hija, todos valía la pena si podía sentarme a almorzar con mi hija y recibir dibujos como estos.

000000000000000000000000

BUENO, HASTA AQUÍ ESTE CAPÍTULO, ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO Y ME DEJEN SUS COMENTARIOS. NOS ACERCAMOS AL FINAL DE TEMPORADA Y DESPUÉS.... LA TEMPORADA CUARTA QUE ES LA FINAL. ESPERO QUE ME SIGAN Y DESCUBRAN LOS SECRETOS QUE EL PASADO DE KYUHYUN ESCONDE Y CÓMO PUEDE DAÑAR SU RELACIÓN CON SUNUNGMIN

domingo, 5 de abril de 2015

No Quiero que me Olvides (Kyumin) - 33

¡HOLA LECTORES!!!!!!!!!! ME ALEGRA VER QUE CADA DÍA LAS LECTURAS SIGUEN SUBIENDO :) LOS AMO LECTORES, ME GUSTA SABER QUE AÚN ME SIGUEN LEYENDO. NO SÉ SI SE DIERON CUENTA, PERO ESTRENÉ UNA NUEVA NOVELA "ÁRBOL DE LA VIDA (EXO)" ESPERO QUE LES VAYA A GUSTAR, PÁSENSE POR AHÍ, ES UNA HISTORIA DE FANTASÍA, ME GUSTARÍA QUE LE DEN EL MISMO APOYO QUE A MIS OTRAS DOS NOVELAS.
00000000000

Capítulo 33





- En sus marcas… listos… ¡Fuera!
Gritó Minnie y yo empecé a correr. Podía notar cómo las personas me tomaban fotos, o como se emocionaban al verme, pero a mí solo me importaba la niña que corría hacia mí, con los brazos extendidos. Tomé a Sunny y la hice girar en el aire, ella comenzó a reír.
- ¡Appa, tramposo!
Rió ella.
- ¿Por qué? – pregunté – Esta vez no te empujé
- Pero tú eres más grande que yo, yo soy chiquita, debes de correr como yo, no como tú
- Eso no tiene sentido… - me quejé, cruzándome de brazos – Eres una mala perdedora
- A veces no sé si tú también eres uno de mis hijos – intervino Sungmin, riendo – Te comportas como un niño
- ¡Appa es un niño grande!
Exclamó Sunny y Minnie rió.
- No… yo soy muy maduro
- No es cierto
Dijo Minnie.
- Soy más maduro que tú
- Eso no es… ¡Omo, que bonito gatito! ¡Yo también quiero uno! ¡Está precioso!
- ¿Y así dices que el inmaduro soy yo?
Pregunté riendo, Minnie me dio un zape e hizo un puchero.
- ¡Ya! No te burles de mí - me ordenó y yo sonreí; Jessica entonces comenzó a removerse incómoda – Saca el biberón de Jessica
- Toma…
Le entregué lo que me pidió.
- Yo también quiero cargarla – pidió Sunny, sentándose en medio de Minnie y yo - ¿Puedo?
- Ten cuidado mi amor – le pidió Minnie, entregándole a Jessica – Pon la cabeza aquí, sostenla firme



- Omma… quiero otra dongsaeng
Pidió Sunny y Minnie abrió mucho los ojos.
- ¿Por qué? ¿No estás feliz con tu hermana?
- Sí… pero appa tiene dos hermanos, un hyung y un dongsaeng, yo quiero ser como Siwon oppa
- ¿No prefieres ser como Heechul unnie?
- No…
Sunny sonrió, tomando el biberón de Jessy y dándoselo con delicadeza.
- ¿Qué sucede? – le pregunté a Minnie - ¿No quieres otro hijo?
- Apenas me estoy adaptando al hecho de que tengo dos hijas – contestó ella, mirándome con seriedad – Que estemos “Llamando a la cigüeña” de nuevo, no quiere decir que mentalmente esté lista para otro bebé. Quizá el próximo año, cuando Jessica esté más grande
- De acuerdo… - abracé a Minnie – El próximo año intentaremos “Llamar a la cigüeña”


***
Mi corazón comenzó a latir con fuerza. No podía creer que después de tres años, de tres largos años, la volvía a ver. Ahora ella estaba ahí, mirándome con sorpresa, delante de mí, con su vestido rosado y la guitarra que le regalé hace mucho en una mano ¿Qué debía de hacer? ¿Abrazarla? ¿Saludarla? ¿Por qué demonios no estaba hablando? La miré de nuevo, ya no había ningún Conejo… a no, tenía un collar con un Conejo ¡No perdió sus Conejos! Mi corazón siguió latiendo con velocidad ¿Qué me pasaba? ¿Por qué sentía esto? Yo ya no debía de sentir esto por ella.
- ¿Qué haces aquí?
Preguntó, dejando su guitarra en la banca donde estaba sentada.
- Yo…
- Tengo clase con los de cuarto, te recomiendo que te vayas
- Sungmin… - el timbre sonó – Yo…
- ¿No oíste? – señaló el techo – Sonó la campa, vete
- Minnie… ¿Por qué estás siendo así?
- ¿En serio me estás preguntando eso? – preguntó, fulminándome con la mirada, me estremecí - ¡Fuera antes de que llame a seguridad! ¡Este es un centro de estudio, no un lugar donde promocionarte!
- Minnie…
- ¡Largo!
La puerta se abrió un grupo de adolescentes entraron en el aula. Todos me quedaron viendo y se miraban entre sí. Miré a Sungmin, ella estaba sonrojada, mirando a otro lado. Bajé la mirada y salí del aula. Caminé por los desiertos pasillos, recordando, intentando no sentirme como me sentía ¿Cómo me sentía? Era una extraña, pero familiar, sensación que nacía en la boca de mi estómago y subía hasta mi pecho ¿Qué era esto?
- ¿Hyung?
Me giré, era Henry, con un pase para el baño.
- Henry…
- ¡Hyung! – él corrió a abrazarme – Ha pasado tanto…




- Sí… - abracé con fuerza a mi dongsaeng – Has crecido
- Y tú… - tocó mi abdomen – Haz hecho mucho ejercicio – reímos - ¿Cuándo volviste?
- Esta mañana…
- ¿Ya le dijiste a omma? – preguntó y yo negué - ¡Hazlo, insensible, ella te ha extrañado desde hace mucho!
- Lo haré, es solo que… he pasado por muchas emociones en muy poco tiempo
- ¿Ah? – me miró con confusión - ¿Por qué estás en la escuela? No me digas que es para recordar buenos tiempos o verme, porque sé que es mentira
- Yo… - miré a Henry, si alguien sabía algo y quería decírmelo sin rodeos, era él – Conocí a Sunny
- ¡¿Qué?! – Henry me empujó contra un casillero, este hizo mucho ruido y miré a los lados por si no había nadie - ¿Cómo?
- Esta mañana, ahjumma estaba con ella
- ¿Qué te dijo?
- Que se llamaba Sunny y que su tía me odia
- ¿Nada más?
- No… - quité las manos de Henry - ¿Qué sucede? Sé claro, por favor, mi cordura se ha ido en una mañana
- No soy el indicado para decirte la verdad – Henry me soltó – Pero eres inteligente, mucho, y ya te habrás dado cuenta
- ¿Estás diciendo que…? – miré a mi dongsaeng con enojo - ¡¿Por qué me lo ocultaron?!
- Eso pregúntaselo a los Kim, ni yo mismo lo entiendo
- ¿Mi omma lo sabe?
- Todos lo saben ¡Todos! ¡Y no me dejaron decirte nada! – comencé a caminar hacia la salida - ¡¿A dónde vas?!
- ¡A casa, a buscar a omma y appa!
- ¡Hyung!
No escuché nada más, salí corriendo de la escuela. Tomé el primer taxi que vi y di la dirección de mi casa. Bajé corriendo del taxi, lanzando el dinero por la ventana. Corrí hacia la puerta y comencé a tocar el timbre y a golpear la puerta con desesperación.
- ¡Ya va! – gritó una voz masculina - ¡Que escándalo! ¡Ya va!
La puerta se abrió y yo me quedé estupefacto.
- ¿Abuelo Jonghyun?




Me quedé viendo al appa de mi omma, sorprendido, pues creí que se había ido a un tour por el mundo con la abuela.
- ¿Sorprendido? – me preguntó sonriente – Sigo siendo sexy
- ¡Deja de molestar nuestro nieto!
- ¿Abuela Key?



Miré a la omma de mi omma, quien usaba un enorme moño rosa en la cabeza.
- Aún luce sexy
Dijo el abuelo, abrazándola.
- ¡¿No sabes decir otra palabra?!
Se quejó la abuela.
- ¿Mis padres?
- Mi hija ha ido de compras, y mi yerno…
La abuela se encogió de hombros.
- Creo que dijo que tenía que ir a ver no sé qué en su empresa
Completó mi abuelo.
- ¿Pasa algo Kyuhyun?
Me preguntó mi abuela.
- Quiero hablar con mis padres…
- Luces nervioso – dijo el abuelo, sentándose en el sofá - ¿Sucede algo?
- No… bueno sí… no sé… - las manos me temblaban, las rodillas también, y me senté al lado del abuelo – Es sobre…
- Solo dilo – pidió la abuela – No puede ser tan malo como tu ropa que no combina
- Es que…
- ¡Kyuhyun!
Gritó una voz.
- ¡Omma! –



me levanté del sofá y corrí hacia mi madre, ella me abrazó - Te extrañé…
- ¡No te vuelvas a ir así, te lo prohíbo!
Mi omma comenzó a llorar.
- Omma…
- ¿Ya has almorzado? – preguntó – Que pregunta, obvio aún no, son apenas las once de la mañana – omma me seguía abrazando, llorando - ¿Cómo ha estado mi bebé? ¿Me extrañaste? ¡Tengo que llamar a Minho! ¡Cuando tus hermano se enteren!
- Omma…
- Te quedarás… ¿Verdad?
- Omma… - ella me miró, preocupada, triste - ¿Quién es Sunny?
- ¿Cómo… cómo… cómo sabes de ella?
- Sí la conoces… - miré el suelo y cerré los puños – Ella… ella… ella… ¿Es mi hija?
- Kyuhyun… - mi omma me miró con preocupación – Yo…
- ¿Por qué no me lo dijeron?
- Kyuhyun…
- ¡¿Por qué siempre me ocultan las cosas?! – grité - ¡No soy un idiota, soy un adulto, tengo derecho a saber las cosas!
- Kyuhyun… cálmate…
Me pidió el abuelo.
- Llamaré al bueno para nada de tu esposo
Dijo la abuela, yéndose de ahí.
- ¡No me quiero calmar! ¡¿Por qué hicieron esto?!
- Porque tú tenías que hacer tu vida, tenías que ser “Cho Kyuhyun”
Me giré, ahí estaba Heechul, con mi hyung de la mano.
- Noona…
- ¿Te haces una idea de cómo se sintió ella cuando le dijiste eso? – me preguntó y yo bajé la mirada - ¡Tú estás enojado ahora, ella estuvo destrozada cuando la dejaste de forma tan egoísta!
- Heechul…



Le advirtió mi hyung, pero la chica lo apartó.
- ¡Mi hermana sufrió mucho como para que tú vengas a reclamar! ¡No tienes derecho a pedir nada! – gritó y yo apreté los puños, sintiendo como las palabras me golpeaban - ¡Y más te vale no acercarte a Sunny! – la miré boquiabierto – Será tu hija pero… no tienes derecho sobre ella, pues también la abandonaste
- Yo no sabía que…
- Te lo iba a decir el día que terminaron
- ¿Qué…?
No podía creerlo ¡¿Esto era cierto?! Había sido un imbécil cuando la dejé, y me arrepentí al instante ¡Pero no me había imaginado esto! Recordé aquel día, ella me había querido decir algo, pero no lo dijo, se fue… sonriendo… ella sonreía, pero de forma extraña.
- Heechul, ya basta, no seas tan dura
Le pidió mi hyung.
- No… ella tiene razón – los miré – Creo que… creo que mejor me voy
- No… no te vayas… - mi omma me tomó del brazo, con los ojos llorosos – Po favor… no te vayas
- Creo que es lo mejor… - me zafé de su brazo – Lo siento… en verdad, y si ven a Sungmin, díganle que lo siento, no tenía… no tenía ni idea…
- Solo vete por donde viniste y no vuelvas a aparecer en la vida de mi dongsaeng – Heechul me miraba con odio, miré a Siwon, él lucía apenado – Tú solo le traes lágrimas
- De acuerdo…
Acepté desanimado. Salí de casa y comencé a caminar sin rumbo, ignorando a todo aquel que me saludaba ¿Cómo había pasado esto? De haberlo sabido, jamás hubiera terminado con Sungmin ¡Tres años! ¡Por el Dios de Siwon! Mi hija debía de tener esa edad ¡¿Cómo es posible que no haya estado para ella en todo este tiempo?! ¡Me quitaron ese tiempo! No… no me lo quitaron, yo me fui, yo renuncié, como dijo Heechul, yo las abandoné.
Sin darme cuenta, estaba de nuevo en mi parque, sentado en mi banca, observando el corazón que hace mucho habíamos tallado Minnie y yo y que aún seguía ahí. “Sungmin y Kyuhyun: BFF” Golpeé la banca ¡Lo había arruinado todo! Tenía a la chica que amaba y la dejé, y ahora… también quería a mi hija ¡No estuve nunca para ella! ¡¿Cómo era posible?! Tenía que remediarlo, al fin y al cabo, también era mía.
Me levanté de la banca, ya eran las dos de la tarde ¿Hace cuanto que estoy sentado? Caminé de nuevo sin rumbo, aunque mis pasos me llevaron de nuevo a la escuela. Me quedé en la acera de enfrente, observando la fachada, mirando a los alumnos salir, felices. Entonces la vi, estaba conversando con su omma, y Sunny le tomaba de la mano.
Ambas sonreían, conversando sobre algo que no podía escuchar ¿Sería sobre mí? Sunny había dicho que su omma siempre le hablaba de mí ¿Sería cierto? ¿Minnie aún me amaba? ¿Y yo…? Me había estado diciendo a mí mismo que lo que sentía por Minnie se había desvanecido… ¿De verdad era así? La miré caminar, con su sonrisa, esa que tanto me gustaba, su sonrisa que siempre me calmaba el día, la que siempre me alegraba el día. Mi corazón comenzó a latir con fuerza ¡Había sido un completo idiota! ¡Obvio que la amaba! ¡Aún la amo! ¡No dejé de hacerlo! No lo hice, pues ella era mi único y verdadero amor, el amor de mi vida ¿Cómo olvidarla?
- ¡Minnie!
Gritó una voz.
- ¡Zhou Mi oppa!
Gritó mi… mi hija, corriendo hacia el edificio andante.
- ¡Sunny!
El edificio andante la recibió con los brazos abiertos y la hizo girar en el aire, la niña solo reía.
- Hola…
Escuché la voz de Minnie, sonriéndole, luego ellos se abrazaron…


***
- Y de esa forma gané el premio a artista del año
Terminé de contarle a Sunny, quien escuchaba atenta desde su cama, con una sonrisa en el rostro.
- ¡Wow! – exclamó ella – Mi appa es impresionante
- Sí… lo soy – sonreí y acaricié el rostro de mi hija – Ahora ve a dormir, mañana será un precioso día – besé su frente – Buenas noches hija
0000000000000000

ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO. HAGAN FELIZ MI DÍA CON UN COMENTARIO :3 LEAN "ÁRBOL DE LA VIDA (EXO)" LOS QUIERO!!! NOS VEMOS EN EL SIGUIENTE CAPÍTULO






miércoles, 1 de abril de 2015

No Quiero que me Olvides (Kyumin) - 32

Wiii!!! lectores!!! Es mi segunda semana de universidad, voy a la mitad de mi carrera!! me está yendo muy bien hasta ahora. Bueno, solo quería decirles eso y agradecerles el apoyo como siempre. Aquí el nuevo capítulo.
000000000000


Capítulo 32



- Aquel día te lo iba a decir, pero entonces tú dijiste todo lo que dijiste y yo me fui
- Fui un idiota – acepte, ella solo me dio unas palmaditas en la espalda – Jamás volveré a hacer algo así, fue lo más estúpido que hice en mi vida
- Por lo menos ya despediste a ese idiota de Dongie y Hangeng está haciendo un excelente trabajo como tu manager
- Sí… es genial – sonreí - ¿Qué más recuerdas?
- Yo le puse el nombre y color a tu club de fans
- Correcto
- Eres un novio muy celoso, me acuerdo que no dejabas que ningún chico se me acercara
- Es que eres demasiado linda – me quejé – Es imposible que no le gustes a alguien, siempre van a caer ante tus encantos
- Supongo que tienes razón – Minnie le hizo mimos a Jessica – Quisiera que nos quedáramos en este momento, juntos y felices
- Ya vendrán nuevos momentos felices, Minnie – acaricie la mejilla de mi hija – Por ahora hay que hacer de cada momento uno feliz
- Sí – Minnie sonrió – Aún se me hace increíble todo esto, estar contigo y tener dos hijas, pero me gusta – Jessica soltó un bostezo – Creo que mi niña necesita ir a su cunita



Nos levantamos del sofá y llevamos a Jessica a su habitación.




Sungmin la arropó y le dio un beso en la cabeza, encendió el móvil, dejando sonar una dulce melodía, y nos fuimos de ahí. Minnie encendió el monitor del bebé y nos volvimos a sentar en el sofá, abrazados.
- ¿A qué hora llega Sunny?
- Ya va a ser el medio día, dentro de poco supongo
Contestó, consultando su reloj.
- Ustedes tres son lo mejor que me pudo haber pasado  en la vida – admití y Minnie asintió – No las volveré a perder
- Yo jamás te volveré a dejar – el timbre sonó – Te dije que Sunny ya debía de estar por llegar
- Yo voy… - me levanté del sofá y caminé hacia la puerta, crucé el camino de graba hasta la otra puerta y la abrí - ¡Sunny!
- ¡Appa!




***
Mi mente debía de estarme jugando una mala pasada, esa niña era idéntica… no, imposible, quizá solo era el color de ropa. Esa niña no podía tener ninguna relación con Sungmin, solo que sus vestimentas me la recordaban. No podía dejar de verla, era exactamente como Minnie a esa edad… ¿Quién era esta niña?




- Discúlpenme… - una mujer entró – Esta niña no debería estar aquí, se escabulló
- Oh…
Dijo el productor.
- Su omma la está buscando, está en la caseta de seguridad – explicó la mujer – Ven pequeña…
- Yo… - la niña me miró – Me alegra poder conocerte al fin
Sonreí, de seguro era una fan, pequeña, pero fan.
- A mí también me alegra conocerte
Sonreí y ella corrió hacia mí. Cuando estuvo a mi lado, me dio un abrazo; me sentí extraño, con esta extraña niña abrazándome ¿Quién era? ¿Por qué me traía tantos recuerdos su rostro?
- Demoraste mucho…
- ¿Qué…?
- Mi omma te ama – soltó la niña y yo sonreí - ¿Tú amas a mi omma?
- No… no sé quien…
- Su omma la está buscando, debo de llevármela – nos recordó la recién llegada – Por favor pequeña, ven conmigo
- Yo la llevo… - dije, tomando la mano de la pequeña, ella sonrió - ¿Por qué te separaste de tu omma?
- Porque quería verte
Contestó la pequeña mientras caminábamos hacia la caseta de vigilancia.
- ¿Y tú omma también quiere verme?
- Supongo… - contestó – Ella te ama, pero mi tía te odia, dice que eres malo
- ¿Yo? – solté una risita – Imposible
- Omma siempre me habla de ti
- Debe de ser una gran fan
- ¿Tú amas a mi  omma?
Volvió a preguntar la niña, yo la miré confundido.
- Es que… no sé quien es tu omma
- Claro que sí – ella debía de estar confundida – Ella es…
- ¡Sunny!
Gritó una voz que conocía a la perfección, una voz que no había escuchado hace tres años. Alcé la mirada y ahí estaba, con el rostro lleno de preocupación, con los ojos llorosos. No podía creerlo ¿Ya habían vuelto? ¿Cuándo volvieron? ¿Seguirían viviendo en la casa de al lado? ¿Cuántas cosas me estaba perdiendo?
- ¡Omma Teukie! – gritó la niña, corriendo hacia Leeteuk - ¡Lo encontré, lo encontré!



- Kyuhyun…
Fue lo único que dijo Leeteuk, mirándome con los ojos bien abiertos.
- Ahjumma…
Miré con sorpresa a quien en algún momento fue como una madre para mí. No podía creerlo, viendo a la niña abrazándola, llamándola omma ¿Era su hija? Imposible, Leeteuk debía de estar rondando los cincuenta y algo, igual que mi omma; era imposible que ella tuviera una hija tan pequeña, debía de tener tres años apenas ¿Era adoptada?
- ¡Lo encontré, omma Teukie, lo encontré!
- Sunny… debemos irnos
Se apresuró a decir la mujer, tomando la mano de la pequeña y mirándome con los ojos bien abiertos.
- Pero… yo me quiero quedar
- Kyuhyun… ¿Qué sucede? – Dongie apareció a mi lado, junto con Hangeng





– Señora Kim
- Omma Teukie, quiero quedarme
- ¡No, Sunny! – le regañó – Debemos irnos, no debiste irte así, todos están preocupados
- ¿Omma sabe que me fui?
Alcé la mirada, entonces Teukie no era la omma de esa niña.
- Sí… - Teukie no me quitaba los ojos de encima – Vamos Sunny
- ¡Espere! – ella se detuvo y me miró, se veía nerviosa - ¿Cómo… cómo está Sungmin?
- Ella…
- Debe de estar en la escuela EXO, ahí también es mi preescolar, pero no fui porque tengo un resfriado
Contestó la niña y yo sentí que el corazón se me aceleraba ¿Qué hacía Minnie en la escuela a la que fuimos cuando éramos niños? Miré a la niña, ella solo me miraba.
- Vámonos Sunny… - le volvió a pedir Teukie a la niña – Kyuhyun… - la miré – Si vas a hablar con Minnie, asegúrate de hacer bien las cosas
- Ahjumma…
- No te puedo decir mucho, no soy la que te lo debe de decir
- ¿Qué es lo que intenta decirme?
- Mi tía siempre dice que eres malo…
Volvió a decir la niña.
- ¡Sunny! – le volvió a regañar Teukie – Adiós…
- Espere… - Teukie hizo una venia y empezó a irse - ¡Espere! – la empecé a seguir, pero ella caminaba con la niña en brazos a paso veloz - ¡Ahjumma!
- ¡Mi tía dice que eres malo, pero yo no lo creo!
Gritó la niña, entremezclándose entre el gentío de la calle.
- ¿Tu tía? – sentí como si algo hubiera hecho click en mi cabeza, uniendo todas las piezas - ¡Espera! – salí del edificio de la MBC – ¡Ahjumma! – las personas se me quedaron viendo - ¡Sunny!



- ¡Kyuhyun! – gritó Dongie saliendo también del edificio - ¡¿Qué sucede?!
- Tengo que irme… - dije, empezando a temblar - ¡Haz mis maletas, me quiero regresar a China, no quiero estar aquí! – empecé a gritar y más personas se me quedaron viendo - ¡Cancela todo, no quiero hacer este drama! ¡Reúne mis cosas! ¡Manda a alguien a que me arregle todo! ¡Búscame otra casa! ¡Aún más lejos! ¡En la luna si es posible!
- ¿Qué está pasando? – preguntó Hangeng – Primero cálmate Kyuhyun…
- ¡No puedo! ¡No quiero! ¡Odio esto! ¡Quiero volver a mi casa! ¡Llévame a casa! ¡Traigan el auto y llévenme a casa!
- Hazlo ya Hangeng – le pidió Dongie – Te traeré agua
Los dos me dejaron y yo volví a entrar en el edificio. Entré en el baño y mojé mi rostro ¡Esto no podía ser cierto! ¡Debía de estar soñando! Quizá… quizá solo era mi imaginación, quizá no era cierto ¡Era imposible! ¿Pero y si sí lo era? ¿Qué debía de hacer? No me podía estar pasando esto, no ahora, no cuando mi fama estaba en lo más alto.
- ¿Qué sucede, Kyuhyun?
Preguntó Hangeng, entrando con una botella de agua.
- Esa niña…
- ¿Sunny?
- Ella…
- ¿Es idéntica a Sungmin?
- ¡Sí! – volví a lanzarme agua al rostro - ¡Es idéntica a Sungmin! ¡Y su omma estaba con esa niña! ¡Y creo que la tía que me odia es Heechul!
- ¿Qué estás diciendo Kyuhyun?
- Creo que… la omma de esa niña…
- No… no me jodas… no estarás diciendo que…



- Creo que su omma es Sungmin
- ¡La puta madre! – exclamó Hangeng, llevándose las manos – No me digas que…
- No lo sé… - contesté – Cuando terminamos, a los pocos meses ella se fue del país…
- Kyuhyun… tienes que buscar a Sungmin y aclarar esto. Siempre te he apoyado en todo lo relacionado con Sungmin, pero esto es distinto, si se descubre que tú… todos se vendrá abajo
- Sí… pero… - miré a Hangeng – Es que… ver a Sungmin…
- ¿Tú ya no sientes nada por ella, verdad?
- Obvio que ya no
Contesté con rapidez, volviendo a mojarme el rostro.
- ¿Entonces cuál es el problema?
- El problema es que… ¡Ah! ¡Tengo miedo! ¡Esto es muy serio y difícil! ¡¿Qué debo hacer?! ¿Mandarla lejos de nuevo? ¡No quiero eso!
- Calma… todo tiene una explicación
- Pues yo quiero la mía, y ya – golpeé el lavabo  y este retumbó, ahora me sentía muy enojado – No puedo creer que ella haya hecho algo así, no puedo creer que me lo haya ocultado
- También está la probabilidad de que no sea tuya…
Miré a Hangeng, sintiendo una presión en el pecho ¿Podía no ser mía? ¿Qué significaba aquello? Que Minnie podía estar ahora en una relación con otra persona, probablemente el padre de esa niña ¿Sería eso? Pero la niña decía que su omma aún me amaba, y suponiendo que su omma sea Sungmin ¿Eso quería decir que estuvo sola todo este tiempo? Lo cual quería decir que había mucha probabilidad de que esa niña si fuera… Las pruebas las tenía en frente, y todas embonaban de tal forma que no cabía duda alguna... ¿Y ahora qué podía hacer?
- Necesito encontrar a Sungmin – dije, saliendo del baño seguido por Hangeng – Iré a mi escuela, la niña dijo que ahí estaba su omma, y si estoy en lo correcto, obviamente será Sungmin
- ¿Y qué harás?
- Ir por respuestas
Contesté, estirando mi mano para que un taxi se detenga. Subí y me despedí de Hangeng con la mano. Miré por la ventana, solté un suspiro y cerré los ojos ¡No podía ser cierto! ¡Debía de haber otra explicación! Mis manos sudaban, mis piernas temblaban, me sentía como un animal que sabe que lo llevarán al matadero ¡¿Es que nada puede ser fácil para mí?! ¡Lo tengo todo! ¡Todo! No podía estar pasándome esto, debía de ser una broma, una de mal gusto. Pensé en el rostro de sorpresa de Leeteuk, sus ojos al no creerse que me estaba viendo, y sus palabras… ¿A qué se refería? ¿Qué cosa quería decir con “Hacer las cosas bien”? Desde que tengo uso de razón, los adultos siempre han actuado con misterio alrededor de mí ¡¿Por qué no pueden decir las cosas claras?!
- Escuela EXO
Anunció el taxista y yo miré la que una vez fue mi escuela. Pagué y salí del taxi, sintiendo que mi cuerpo era convertido en gelatina. Entré en la escuela, mirando a diestra y siniestra por si me la encontraba. No había nadie en los pasillos, por la hora debían de estar en clases, eso estaba bien por mí, pues no quería que las fans me vieran, o Henry.
Continué caminando por los pasillos, recordando mis días de escuela, recordando los buenos tiempos, y cómo es que no pude graduarme junto con mis amigos. Por algún lado mi hermano debía de estar estudiando, quizá también la niña rosa ¿Ellos se conocerían? ¿Henry sabía la verdad? ¿Eso era lo que él intentaba decirme, pero no podía? Eran muchas preguntas y cero respuestas, pero aquí estaba yo, aventurándome en lo que probablemente sería un pozo sin fondo de agonía y amargura.
Continué recorriendo la escuela, pensando en dónde podría estar Sungmin. Solo había un lugar en la escuela donde ella podía estar, y ese era el salón de música. Empecé a caminar hacia el salón, recordando cómo a Sungmin le encantaba pasar horas ahí, aunque no eran muchas porque la mayor parte del tiempo estaba enganchada a mi brazo izquierdo. Ahora ella trabajaba aquí, quizá era maestra, quizá enseñaba a música o algún idioma, eso siempre le gustó. Me detuve en el pasillo… ¿Minnie no quería, a caso, ser música profesional? ¿Qué hacía enseñando en una escuela?
Llegué al salón de música y me detuve con la mano en el picaporte. Podía oír música en su interior ¿Ella estaba ahí? ¿Componiendo? No, era algo que ya existía, lo reconocía ¿Qué hacía ahora? ¿Entraba? ¿Y si estaba ahí? ¿Qué haría? Yo ya no sentía nada por ella, así que no me debía de importar en lo absoluto más allá de mi imaginaria culpa.
Abrí la puerta y caminé unos pasos. Ahí, con una guitarra, dándome la espalda, estaba ella. Debía de ser ella, pues no creía que hubiera otra maestra que viniera a trabajar en un vestido rosa.



Ella dejó la guitarra a un lado, mi corazón comenzó a latir, entonces se giró…
- Kyuhyun…
- Sungmin…


***
- Y entonces pusieron tu nueva canción y yo dije: “¡Ese es mi appa!” – Minnie y yo reímos – Y varios niños me preguntaron qué se sentía tener un appa famoso
- ¿Y qué respondiste?
Pregunté curioso.
- ¡Que es divertidísimo! – exclamó Sunny, haciendo ademanes – Te quiero appa
- Yo también hija
Nos dimos un abrazo. Amaba a mi hija más que a nada en el mundo. Besé su frente y ella siguió comiendo, sonriente.
0000000000000000000000000000000

ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO!!! COMENTEN!!!