Capítulo 35
- Bebé… aquí viene el
avioncito…
- Appa, no soy un
bebé
Rió Sunny, sentada en mis piernas.
- No pude hacer esto
nunca, déjame hacerlo ahora
Le pedí, haciendo un puchero.
- De acuerdo
Sunny abrió la boca y yo introduje la cuchara,
luego limpié la boca de mi hija con el babero de Jessica.
- Que buen padre…
Dijo Minnie, sonriente, amamantando a Jessica.
- No me considero el
mejor, a penas voy un año en el negocio, pero lo intento
- Para mí si eres un
buen appa
Intervino Sunny, tomando su cuchara y comiendo
ella sola.
- Gracias…
***
- Minnie…
Ella me miró, sentada en el piano del salón de
música, con la boca entreabierta y las mejillas sonrojadas. Había estado
tocando una canción, una de mis canciones, aquella que hablaba sobre ella,
aunque todas mis canciones hablaban sobre ella. Minnie tomó sus partituras y se
levantó, acomodando con nerviosismo los instrumentos que nos rodeaban.
- ¿Qué quieres?
Habló al fin, sin mirarme, tomando un trapo y
limpiando los instrumentos de metal.
- Venía a verte…
Ella dejó de limpiar y me miró, luego bajó la
mirada y siguió su labor.
- Ya te puedes ir, ya
me viste…
- Minnie…
- Por favor, Kyuhyun…
- volteó a verme - ¿Qué es lo que quieres? – preguntó, guardando el trapo -
¿Ver a Sunny? De acuerdo, te dejaré verla
- No es lo único que
quiero…
Minnie me miró y negó con la cabeza.
- No sé cuál es tu
juego, pero desde ya te digo que lo dejes, no me gusta
- Minnie… - me
acerqué a ella – Yo aún…
- Han pasado tres
años, Kyuhyun, es mucho tiempo, en los que no diste señales de vida – empezó a
decir, sentándose en la banca del piano – No puedes esperar que las cosas sigan
iguales, porque no lo son, ya no, ya no soy la misma que te hubiera esperado
eternamente
- Minnie… yo… - la
miré fijamente – Aún te amo
- Tres años Kyuhyun…
- volvió a decir – Si fuera cierto, hubieras vuelto antes
- Pero…
- Mira… - Sungmin se
me acercó, sonriendo, pero no eran las típicas sonrisas que ella me daba – Yo
continué con mi vida, a pesar de todo, tú has lo mismo
- No quiero…
- Creo que estás
confundido – la miré sin entender – Has visto a Sunny y algo en ti despertó, es
normal, enterarte así de que tienes una hija… - miré el suelo, sintiéndome mal
– Pero eso no significa que aún me ames
- Sí te amo
- Si lo hubieras
hecho no te hubieras ido – Minnie me miró fijamente, con tristeza – Siempre me
decías que la fama no nos separaría, que no lo permitirías, pero lo hiciste
- Yo lo siento… en
verdad no quería
- Pero lo hiciste –
asentí – El que hayas o no tenido la intención, queda irrelevante, porque lo
hiciste
- Pero tú te fuiste
primero
Le recordé y ella chasqueó la lengua.
- ¿Lo olvidaste? – me
preguntó, negando con la cabeza y riendo – Me terminaste justo cuando te ibas
de gira ¿Yo me fui? Sí… después de que me dejaste para ir a tu gira como el
famosísimo “Cho Kyuhyun” que ahora
estaba soltero
- Sungmin…
- Solo vete ¿Quieres?
– me pidió – Por favor, y no vuelvas a insistir. Lo único que nos une es Sunny,
fuera de eso no eres nada mío
- Sungmin…
- Deja de repetir mi
nombre, por favor – sentí que el corazón se me detenía y volvía a latir, pero
era doloroso – Y deja de venir a verme, no quiero volver a pasar por lo mismo
- De acuerdo… - me escuché
a mí mismo hablar – Supongo que me iré…
- ¡Espera! – me giré a
verla, esperanzado – Tú quieres estar cerca de Sunny – asentí - ¿Cómo lo vas a
lograr si eres un ídolo famoso?
- Yo…
- Fue mi decisión
tener a Sunny y no decirte nada – confesó – No quiero a mi hija como foco de
los medios – me miró fijamente – Y tampoco quiero que tu carrera se vea
afectada por mi culpa…
La miré sorprendido ¿Ella se preocupaba por mí?
¿Lo estaba haciendo? ¿Esto significaba algo? Detrás de esa pared que había
construido entre nosotros dos, tal vez, quizá, ahí aún estaba mi Conejo.
- Descuida, yo me las
arreglaré – ella asintió – Por ahora lo único que quiero es conocerla y…
hacerme responsable
- Bueno… ya no tendré
tantos problemas con el dinero entonces
Minnie rió y yo no pude evitar hacer lo mismo.
- Sungmin… - una
maestra entró por la puerta – Sunny está con fiebre
- ¿Otra vez? –
preguntó Minnie, mirando su reloj – Tengo clases en cinco minutos – la campana
sonó - ¿Dónde está?
- En la enfermería,
se puso pálida y su profesora pensó que sería lo mejor
- Yo la puedo llevar
– me ofrecí - ¿La llevo al hospital?
- No – contestó
Minnie – Es solo fiebre, no amerita que se vaya al hospital, solo llévala a mi
casa – me entregó la llaves – Ahí hay medicinas y… Kyuhyun… ¿Podrías quedarte
con ella hasta que vuelva?
- ¿Yo?
Pregunté sorprendido y de cierta forma,
asustado.
- Sí, quiero que lo
hagas
Sus palabras me sorprendieron aún más.
- De acuerdo…
- Bien… ve, ya sabes
dónde está la enfermería
- Sí…
- Kyuhyun… - la miré
– Cuídala
- Como si fuera mía
Contesté, sonriendo, ella hizo lo mismo, y
entonces salí del salón de música, escuchando que la otra maestra le
preguntaba:
- ¿Siguen juntos?
- No… él es solo un
amigo
Caminé hacia la enfermería, sintiéndome
extrañamente optimista. Tal vez ella había dicho que solo éramos amigos, tal
vez la palabra “Amigo” me dolía como
si fuera una bala al pecho, pero al menos demostraba que no había odio, que tal
vez el enojo que sentía hacia mí estaba menguando. Entré en la enfermería y vi
a la pequeña niña en una camilla con un pañuelo blanco en la frente.
- Sunny…
- ¡Eres tú!
Gritó, mirándome con ojos vidriosos y una gran
sonrisa en los labios.
- ¿Kyuhyun?
Me giré, era Hyoyeon, una de las viejas amigas
de Seohyun.
- Hyo… ¿Eres la nueva
enfermera?
- Sí…
- Yo… vengo por Sunny
- ¡Oh! – miró a la
niña y luego a mí - ¿Los rumores eran ciertos?
- Hyo…
- Cuando Seo se
entere de esto… pegará el grito en el cielo, ella sigue obsesionada contigo y
con hacerle la vida imposible a Sungmin
- Hyoyeon… no le
puedes decir nada a nadie, en especial a Seohyun
- De mi boca no
saldrá nada – dijo – Pero ella lo averiguará, después de todo, Soon Kyu es la
hija ilegítima de “Cho Kyuhyun”, y tu
vida es un libro abierto
- Hyo…
- Puedes llevártela,
pero debiste de evitar venir, no es sensato, les darás algo de qué sospechar a
la prensa que te persigue
- Hyo… gracias…
- Solo lo hago porque
Seohyun es una perra y Sungmin una chica muy agradable, pero tú sigues siendo
un imbécil
- Lo sé – no pude
evitar reír – Igual… gracias
- Appa… - Sunny me
jaló de la manga - ¿Quién es Seohyun?
- Nadie importante –
contesté, cargándola en brazos – Ahora señorita, vamos a casa para que te tomes
las medicinas, descanses y comas muchos dulces
- ¿Y mi omma?
- Está ocupada –
contesté, saliendo de la enfermería – Así que pasarás tu primer día con appa
- ¿Mi primer día con
mi appa? – preguntó sonriente, abrazándose a mí - ¡Sí! ¡Tendré todo un día con
appa!
***
- Eso demuestra que
sí eres un buen appa
Dijo Sungmin, dándome un beso. Empecé a
corresponderle, dejando la comida de Sunny de lado y abrazando a mi novia.
Esperé tanto para que me dijera eso, ahora todo podía ser perfecto, juntos,
como debió ser… el timbre sonó.
- Yo abro, debe de
ser Henry
Me separé de mi novia y salí de la casa. A veces
pensaba que darle una llave de casa a Henry sería buena idea, él se quedaba de
viernes a domingo en casa, debía de darle una llave y dejar que me demuestre lo
responsable que es con la casa de su hyung. Caminé por el sendero adoquinado y
abrí la puerta…
- ¡Kyuhyun!
- ¡¿Omma Onew?!
Pregunté, casi cayéndome al ver a la omma de mi
appa.
- ¡Estás enorme!
Mi abuela entró en la casa y detrás de él mi
abuelo con dos maletas.
- Appa Joon – saludé
a mi abuelo, appa de mi appa – Déjeme ayudarlo con eso
- ¡Mejor ayúdame a mí!
Gritó una
voz, era mi abuelo Jonghyun
cargando todas las maletas de la abuela Key.
- ¡Ay,
no te quejes, apenas son diez maletas!
Exclamó la abuela Key.
- Hola omma Key
Sorprendido al ver a mis cuatro abuelos reunidos
en mi casa.
- Yo te ayudo, Jong
Se ofreció appa Joon, tomando unas cuantas
maletas. Entre todos logramos meter las maletas de omma Key. Yo aún no entendía
qué hacían todos mis abuelos ahí, pero suponía que mi omma tenía algo que ver
en ello.
- ¡Minnie, mis
abuelos han venido!
Anuncié, entrando a la mansión con las maletas.
- ¡Ya sabía, por eso
hice mucho pollo frito!
- ¿Alguien dijo pollo
frito?
Preguntó omma Onew, sonriendo ampliamente.
- Espero que
Sungmin-shi haya hecho mucho
Susurró appa Joon.
- ¿Qué hacen todos
aquí?
Preguntó Henry, entrando en la casa.
- Mi hija me dijo que
nos quedaríamos en la casa de Kyuhyun hasta la boda de Siwon
Contestó appa Jong.
- Hablando de hijos…
quiero ver a los míos
Se quejó omma Onew.
- Minho debe de estar
en su casa, Yunho debe de estar en el trabajo
Dijo appa Joon, mirando su reloj.
- ¡Abuelos!
Gritó Sunny, corriendo hacia ellos.
- ¡Soon Kyu! – gritó
omma Key - ¡¿Que demonios llevas puesto?!
- Aquí vamos de nuevo…
Susurró Henry; iban a ser unos largos días hasta
la boda de Siwon, sobre todo si mis cuatro abuelos se quedaban en mi casa…
000000000000000000
ESPERO QUE LES HAYA GUSTA. ESTE FINAL ME DIVIRTIÓ MUCHO, MIENTRAS LO ESCRIBÍA ME IBA IMAGINANDO CÓMO SERÍA TENER CUATRO ABUELOS LOCOS ^^ HAHAHAHA. BUENOS CHINGUS!!! ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO, COMENTEN!!! SIEMPRE ES BUENO SABER SI LES ESTÁ GUSTANDO HASTA AHORA LA HISTORIA, A PESAR DE QUE NO SEA UN YAOI. LES PROMETO QUE MI SEXTA NOVELA SERÁ UN YAOI, CUANDO TERMINÉ DE ESCRIBIR LA QUINTA NOVELA QUE ESTOY ESCRIBIENDO LO HARÉ ¡LO JURO!!!! BESOS A TODOS!!!